Junto con toda su familia la Iglesia da gracias a Dios por la vida de Lola, y con el Bautismo le hace el mayor regalo que puede: afirmar la presencia de Dios en su vida e incorporarla al grupo de los creyentes.
¡Felicidades a los papás! ¡a los padrinos! y... ¡a Lola!
Al final de la celebración se ofreció la vida de Lola a la Virgen del Perpetuo Socorro, pidiendo por su intercesión su cuidado, cariño y protección.
Lola,
ResponderEliminarLa más guapa.
Ole la Lola.
Sale bien hasta cuando la están echando el agua...si es que es para comersela o no?
ResponderEliminarMírala que mona!!
ResponderEliminarOle la Lola :D como dice mi tururú