Es falso porque a esta noticia le pasa como al protagonista de la misma: un bebé llamado Juan Bautista de María, y que sólo vivió unos minutos. ¿Por qué decimos falso? porque al igual que la vida de este bebé ha sido inmensa, es también inmensa esta noticia.

¿Podrías explicarte mejor?...
Juanito fue concebido por un matrimonio con una relación grande con nuestra Comunidad Cristiana. Sus padres son Jose A. Poveda y María Bonilla. Desde el comienzo del embarazo la noticia era clara: el bebé venía con muchos problemas vitales y algunas malformaciones evidentes, que además le hacían incompatible con la vida.
¿Entonces por qué seguir adelante?
Esa es la pregunta que más sorprendidos han tenido que escuchar sus padres... Quizás la verdadera pregunta es ¿QUIEN SOY YO PARA DECIDIR SOBRE LA VIDA DE OTRO? aunque sea mi hijo. Esa es la certeza que han vivido desde su fé, esa es la esperanza que les ha sostenido.
Ese bebé ha sido una imagen clara de lo que dice el profeta Isaias: como aquel ante el cual se vuelve el rostro. Pero sus padres le han mirado a la cara y a los ojos con el mismo amor que a sus dos hijos mayores. Y durante la gestación, y en su corta vida, ha sido un niño que ha vivido en el amor de sus padres y de toda su familia.
Porque sus padres han querido a su hijo Juan tal y como era, y no le han exigido ser "de ninguna otra manera para aceptarle". ¿Es mayor gesto de amor de unos padres?
Quien no lo entienda, que reze. Es un testimonio que hoy nos hace a todos dar gracias a Dios por el don de la vida y de la fe.
Por eso es falso que la noticia sea pequeña o la vida de Juan poco importante. Su breve vida fue dentro del amor de su familia y acogido por la Iglesia Creyente. ¿Podemos dar algo más? El mayor tiempo, no supone mayor consecución en la vida.
El dolor humano, que existe, queda embalsamado en la presencia de Dios que nos garantiza que ese niño está con ÉL.
¡DEMOS GRACIAS A DIOS!
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