viernes, 30 de septiembre de 2011

El Papa da las gracias a todos los que hicieron posible la JMJ de Madrid

Ecos de la “fiesta de fe” con los jóvenes del mundo

logo jmj2011A todas las personas que hicieron posible la “fiesta de la fe” de la pasada Jornada Mundial de la Juventud “los llevo gozosamente en mi corazón”, afirmó Benedicto XVI. Lo hizo en una carta dirigida al arzobispo de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), el cardenal Antonio María Rouco, que lleva fecha del 22 de agosto y fue publicada este jueves por la CEE.

“Al regresar a Roma después de los inolvidables días de mi Visita Pastoral a Madrid para la XXVI Jornada Mundial de la Juventud, quisiera manifestar a Vuestra Eminencia mi más cordial reconocimiento por las innumerables muestras de hospitalidad y las continuas atenciones que me ha dispensado durante mi reciente permanencia en España”, escribió el Papa.

En su misiva, Benedicto XVI pidió al cardenal que transmitiera su “viva gratitud” a los obispos sufragáneos y auxiliares de la arquidiócesis de Madrid, así como a las autoridades civiles, las fuerzas de seguridad, el personal sanitario y los “incontables voluntarios que se han empeñado en tan magno evento juvenil”.ImagenPortada_419

Y expresó su cercanía a los presbíteros y representantes de la Vida Consagrada “por su generosa implicación en este significativo encuentro”. “Que todos y cada uno de los que han hecho posible esta fiesta de la fe que hemos vivido juntos, cooperando en ella de diferentes formas y entregando lo mejor de sí mismos en su preparación, desarrollo y feliz culminación, sepan que los llevo gozosamente  en mi corazón”, escribió.

El Papa indicó que corresponde “complacido a tanta deferencia como he experimentado a lo largo de mi Viaje Apostólico, suplicando a Dios que enriquezca a todos l os hijos  de esas nobles tierras con la abundancia de dones de su amor  y misericordia”.

Por su parte, el Comité Ejecutivo de la Conferencia Episcopal Española se unió al agradecimiento que el cardenal Rouco le expresó al Papa en una carta fechada el mismo 22 de agosto. Según los obispos, “la Jornada Mundial de la Juventud ha supuesto un acontecimiento de Gracia para la Iglesia y ha dado al mundo entero un testimonio público de fe, contribuyendo de esta manera a que el camino de la Historia se haga bajo el signo de la esperanza”.

También agradecieron la acogida que prestaron tantas personas a las decenas de miles de peregrinos que llegaron en los días previos a las diócesis españolas, camino de Madrid.

Algunos datos

Durante el mes de agosto, Madrid experimentó un aumento del 42% en las visitas a la ciudad y el ayuntamiento de la capital española, junto a Patrimonio Nacional, reconoció la aportación de la JMJ concediéndole el Premio de Turismo de la Ciudad de Madrid por “su contribución a la proyección internacional de la ciudad”.

Por su parte la Confederación de Empresarios de Madrid (CEIM) estimó el beneficio económico obtenido por la ciudad en 160 millones de euros.

El sector más beneficiado por la JMJ fue el hostelero, que recibió 39 millones de euros, sólo con el reparto de comidas a los peregrinos inscritos en la JMJ.

La Comunidad de Madrid estimó que la Jornada Mundial de la Juventud supuso un incremento de 148 millones de euros en el Producto Interior Bruto de la región.

Internet también fue testigo del aumento del interés sobre la capital española. Sólo en Google se ofrecen más de siete millones de resultados en las búsquedas sobre Madrid y la JMJ.

El portal de viajes Skyscanner ha emitido un informe en que se reconoce que el interés por los vuelos  hacia Madrid desde todo el mundo ha aumentado un 70%.

jueves, 22 de septiembre de 2011

VIAJE APOSTÓLICO DE BENEDICTO XVI A ALEMANIA

Benedicto XVI da comienzo hoy a uno de los viajes más difíciles, y esperanzadores, de su pontificado. Su tercera visita a Alemania viene marcada por las protestas de grupos ateos y parlamentarios de izquierda, que ya han confirmado que no asistirán a su histórico discurso en el Bundestag. El escándalo de los abusos sexuales, que llegó a salpicar al hermano del Papa -y al propio Ratzinger, por una supuesta inacción ante un caso en su diócesis de Múnich-, también tendrá su impacto. Benedicto XVI se encontrará, como ya hiciera en Reino Unido o Malta, con víctimas de la pederastia clerical.

Sin embargo, el momento más impactante será el oficio religioso conjunto en la iglesia de monasterio de Erfurt, donde Martín Lutero ofició misa por primera vez.

Ante los principales líderes evangélicos alemanes, el Papa reivindicará la figura del fraile agustino, impulsor de la Reforma que acabó rompiendo en mil pedazos la Cristiandad ahora hace cinco siglos. "Otorgar a Dios un lugar central en la sociedad", es uno de los objetivos de la visita. Y para ello, sostiene el Papa, los cristianos han de mostrarse unidos en lo esencial. Para Benedicto XVI, Lutero fue un "buscador de la verdad", y se espera un reconocimiento de esta búsqueda, en público, delante de las autoridades luteranas de Alemania. Un gran paso para el ecumenismo.

martes, 20 de septiembre de 2011

Felicitaciones del Papa por los 104 años de la religiosa española Sor Teresita, de Buenafuente

clip_image002“Todo es misericordia. Si nos levantamos, si comemos, si vivimos es por la misericordia de Dios. La conclusión que he sacado de la visita del Papa es que tengo que ser más santa. Si fuéramos santos, podríamos con todo”. Sor Teresita

El 16 de septiembre, día en que cumplió 104 años, la religiosa española cisterciense, sor Teresita, recibió una carta especial de parte de Benedicto XVI, en la que el Papa recordó su encuentro en la Nunciatura de Madrid el pasado 20 de agosto.

Era la segunda vez que la religiosa salía de la clausura después de haberlo hecho, obligada por las dramáticas circunstancias, durante la Guerra Civil española (1936-1939).


La religiosa, que entre todos los conventos del mundo tiene el récord de mayor permanencia en clausura, casi 85 años, poco antes del viaje del Papa a Madrid, con ocasión de la Jornada Mundial de la Juventud, había ya manifestado el deseo de encontrarse con el Santo Padre.


En pocas horas el Nuncio apostólico en España, el arzobispo Renzo Fratini, comunicó a la religiosa la total disponibilidad del Papa y así, el sábado 20 de agosto, sor Teresita se encontró delante de Benedicto XVI. Se trató, como escribieron las agencias, de una reunión conmovedora y de una sorpresa: la hermana que acompañaba a sor Teresita, la M.Abadesa, era conocida del Papa porque en el pasado había trabajado en la Congregación para la Doctrina de la Fe, cuando el cardenal Joseph Ratzinger era Prefecto de la misma.


En la carta, firmada por monseñor Peter Brian Wells, asesor para los Asuntos de la Secretaria de Estado, se lee que el Papa, recordando el bellísimo encuentro, la “anima a seguir firme en el Corazón de Cristo para continuar siendo una ardiente lámpara de fe, esperanza y caridad y mostrar así al mundo que la vida en plenitud consiste en el cumplimiento de la voluntad de Dios con alegría”. Finalmente el Papa le manda a la religiosa, sus hermanas y a todos los benefactores del convento “Madre de Dios” su especial bendición.


La religiosa española cisterciense, nacida en Valeria en 1908, ha vivido casi toda su vida en el convento de Buenafuente del Sistal (a 100 km del nordeste de Madrid), en la provincia de Guadalajara, donde entró cuando tenía 19 años, el mismo día que nació Joseph Ratzinger, el 16 de abril de 1927.


Durante más de 20 años fue superiora de su comunidad religiosa y colaboró con otras nueve monjas de clausura en la composición de un libro llamado: ¿Qué hace una chica como tú en un sitio como éste?”, para explicar la riqueza interior y la felicidad que implica la vida contemplativa.

martes, 13 de septiembre de 2011

14 de Septiembre: fiesta de la Exaltación de la SANTA CRUZ

La Cruz, podium de la Gloria

clip_image002Hoy se cumple la cuarentena que se iniciaba el día 6 de agosto, fiesta de la Transfiguración del Señor. Desde aquel resplandor, se comprende la exaltación de la Cruz.

Se humilló a sí mismo, obedeciendo hasta la muerte y muerte de cruz. Por lo cual Dios le exaltó y le otorgó el Nombre, que está sobre todo nombre. (Flp 2, 8-9)

A este Jesús Dios le resucitó; de lo cual todos nosotros somos testigos. Y exaltado por la diestra de Dios, ha recibido del Padre el Espíritu Santo prometido y ha derramado lo que vosotros veis y oís” (Act 2, 34-35)

Desde el misterio de Cruz de Cristo exaltada, se pueden comprender algunas paradojas:

Cuando llegues al límite, experimentarás la fuerza de la gracia.

Cuando sufras el despojo de los que amas, experimentarás que Dios es más.

Cuando te atrevas a correr el riesgo de la obediencia a la llamada, gustarás la verdad de que se cumple la promesa del Evangelio de recibir cien veces más.

Cuando sientas que no llegas a alcanzar la meta, averiguarás el secreto de la confianza.

Cuando pierdas las razones lógicas de recorrer el camino del seguimiento, escucharás en tu corazón indicaciones llenas de sabiduría que serán luz.

Cuando sientas la extrema soledad, descubrirás la presencia compañera más íntima.

Cuando pienses que todo parece perdido, tu pobreza se tornará riqueza.

(Angel Moreno, de Buenafuente)

jueves, 8 de septiembre de 2011

REFLEXION PASTORAL SOBRE LA JMJ 2011

Evento fiesta MJS sonreid  (1) D.Pascual Chávez, Rector Mayor de los Salesianos, publica en el último número de la revista Vida Nueva dedicado a hacer balance de las JMJ, un interesante artículo. (Se adjunta un extracto del mismo)

"He dejado Madrid hace un par de días después de haber vivido una de las experiencias más entusiasmantes en mi vida de educador y pastor en medio de los jóvenes participantes en la Jornada Mundial de la Juventud. Era mi tercera experiencia, así es que había ido a España con el recuerdo de las anteriores y convencido del valor de este tipo de eventos. Si hay una expresión que puede sintetizar lo vivido estos días del 16 al 21 de agosto del 2011 es la que ha sido usada desde el principio para definir lo que estaba sucediendo: un festival de la fe.

Me ha gustado descubrir que, finalmente, la prensa –nacional e internacional– leyó honestamente el evento, superando la tentación de ofrecer lecturas hechas desde lugares comunes o, peor aún, nutridas de prejuicios. Había que estar en medio de esos jóvenes, y no desde la distancia –sin que esto significara desempeño en descifrar los comportamientos, gestos, actitudes, cantos, celebraciones– para valorar justamente esta Jornada Mundial de la Juventud. Y me refiero concretamente a esta porque –como ya la anterior de Sidney, Australia– había sido precedida de circunstancias y juicios negativos, casi augurando o preludiando un fracaso; a ‘esta’ porque –como ninguna de las precedentes, incluidas las de París o Roma– había contado con una cantidad y calidad tan sobresalientes de los participantes.

Venidos de todos los continentes, prácticamente de todos los ángulos de la tierra, de razas, lenguas, culturas y contextos tan variados, el perfil que los unía era el de ser una nueva generación, constituida por jóvenes normales, alegres, pacíficos, generosos, soñadores, entusiastas, portadores de esperanza y futuro, preparados, convencidos de estar llamados a ser no meros consumidores de productos, sensaciones o experiencias ni simples espectadores de este escenario del mundo, sino protagonistas en el actual proceso de transformación de la humanidad, seguidores de Jesús y orgullosos de proclamar su fe y su pertenencia a la Iglesia.

Que el elemento determinante de estos jóvenes sea la fe, no hay duda. Ciertamente puede haber –y de hecho las hay– otras motivaciones para emprender largos y fatigosos viajes, para soportar la inclemencia del tiempo (calor, viento, lluvia), las incomodidades de alojamiento o las costumbres alimenticias diversas, y para confrontar otras sensibilidades culturales o sociales y otras opciones personales, pero la energía que permite afrontar con señorío todos estos desafíos es el amor de Jesús y el amor a Jesús y a los demás. Por todo ello, es justo calificar esta JMJ como un festival de la fe.

El contexto en que se ha realizado la JMJ de Madrid no es irrelevante, pues está caracterizado por la globalización que estamos viviendo, marcado por la preocupante crisis económica y financiera que está golpeando duramente a todos los países, teniendo siempre delante el fantasma de una nueva recesión, que parece estar al acecho. En una palabra, el contexto actual es el de un proceso profundo de transformación social y cultural.

La así llamada primavera árabe, ese movimiento que en sus inicios se caracterizó por su autonomía de toda afiliación política o religiosa, que comenzó en Túnez y que se extendió a todo el norte de África, a los países del Golfo y el Medio Oriente exigiendo respeto por la dignidad y libertad de la persona, oportunidades de educación y trabajo, derechos humanos y capacidad de autodeterminación política, ha sido seguida por otros signos de malestar social, como el caso de los “indignados”.

Pues bien, sin indicar explícitamente este escenario mundial y regional, “las alegrías y las esperanzas, las angustias y las tristezas” que vive la humanidad estuvieron presentes y se convirtieron en oportunidad para el crecimiento y el compromiso, con la invitación a no tener miedo al futuro y llenar de esperanza este mundo.

Programas de vida

Así entendí el mensaje del Santo Padre, que en Madrid ha vivido una de las experiencias de su vida más significativas. Mucho se ha hablado de la diferencia entre las personalidades de Juan Pablo II, iniciador y pionero de las JMJ, y Benedicto XVI, por lo que no me parece que valga la pena añadir nada al respecto. Sí, en cambio, respecto a la forma de interpretar su rol de sucesores de san Pedro, llamados a confirmar la fe de sus hermanos, en este caso, de los jóvenes.

Mientras el primero, precisamente por la incomparable capacidad de comunicar que tenía, podía favorecer –aun sin pretenderlo– un culto a la persona, el segundo explícitamente busca disminuir su imagen para que Cristo crezca en la mente y en el corazón de los jóvenes. Su indiscutible calidad teológica y de profesor le permite anunciar el Evangelio en un lenguaje que lo hace comprensible y relevante para la persona de hoy, buscando suscitar aquellos interrogantes de la existencia humana que abren caminos de búsqueda hacia Dios, para hacer luego ver cómo en Jesús Dios se ha revelado y entregado totalmente al hombre.

Las intervenciones que el Papa ha tenido a su llegada a Madrid, su mensaje de apertura de la JMJ en Cibeles, los encuentros con los diversos grupos de personas, comenzando por el de los universitarios y terminando con el de los voluntarios que tan generosamente sirvieron durante todo el evento, siguiendo con el de las religiosas y el de los seminaristas, las homilías durante el Vía Crucis o en la Vigilia eucarística –aunque haya tenido que interrumpirlo y cortarlo cuando llegó un vendaval y una tormenta de agua que puso en riesgo la continuidad de la celebración– o en la Eucaristía de clausura, han sido todos cuidadosamente preparados, sin dejar nada a la improvisación y sin reducirlos a saludos meramente formales. De allí la necesidad de que sean estudiados y transformados en programas de vida.

La JMJ de Madrid ha demostrado ser una auténtica manifestación de la fe y de la Iglesia y una vía significativa de nueva evangelización, justamente porque la Jornada Mundial de la Juventud ya no es un evento, tal vez espectacular, sino un verdadero camino de fe, con una increíble fuerza de convocatoria. Ella representa el descubrimiento cada vez más grande del valor de la sinergia, no solo para vencer el aislamiento en que podemos encontrarnos viviendo la vida o testimoniando la fe, sino sobre todo para encaminar a los discípulos del Señor Jesús hacia objetivos comunes, en modo tal de hacer verdad la identidad dada por Jesús a sus discípulos: “Ser sal de la tierra”, “ser luz del mundo”, “ser ciudad construida sobre el monte”.

Esto será posible en la medida que hagan de las bienaventuranzas su auténtica carta de identidad y sean pobres de espíritu, hambrientos de justicia, misericordiosos, puros de corazón, amantes de la paz. Es obvio que tanto las personas en su singularidad como los grupos y movimientos en cuanto tales tienen su propia sensibilidad, su visión de la realidad, de la fe y su espiritualidad, y, por lo tanto, su manera de entender y realizar la nueva evangelización hoy.

Sin negar la importancia y necesidad de la vía kerigmática, especialmente en las sociedades poscristianas, estoy convencido de que sin educación no hay evangelización que dure y que sea capaz de dar razón de la propia esperanza, que hoy no se puede ayudar a madurar cristianos sin inculturación del Evangelio, que el lenguaje religioso debe responder a la cultura juvenil de hoy para evitar que sea incomprensible e irrelevante, y, por ende, estéril.

Experiencia espiritual

Concluyo confirmando el valor de las JMJ, que tienen en los jóvenes la base de entusiasmo, gratuidad, profecía, valor y alegría que hoy necesita cualquier sociedad que alimente el sueño de ser capaz de generar sentido de la existencia y calidad de vida.

Reafirmo igualmente las perspectivas pastorales que ofrece una Jornada Mundial de la Juventud como esta de Madrid: al mundo de hoy no se lo puede evangelizar sino asumiendo el modelo de la Iglesia primitiva de Jerusalén, formada por personas que habían tenido una fuerte experiencia espiritual que había cambiado sus vidas, que habían experimentado la gracia de la comunidad hasta el punto de ser un solo corazón y una sola alma, pues todo lo ponían en común, alimentados por la Palabra y la Eucaristía, y sostenidos por la oración, hasta en convertirse en un auténtico modelo cultural alternativo".

sábado, 3 de septiembre de 2011

DAMIAN MARÍA, REDENTORISTA, CANTÓ LA SAETA EN EL VIA CRUCIS DE LA JMJ ANTE EL PAPA


Damián María Montes, un redentorista de 25 años de origen granadino, cantó una saeta ante el Papa durante el Vía Crucis que tuvo lugar el viernes 19 de agosto y que se inscribía entre los eventos de mayor importancia de la Jornada Mundial de la Juventud Madrid 2011.

Damián María, durante dos minutos, en la estación octava correspondiente a la Verónica, dejó sobrecogidos, no solo a los asistentes, sino a los cientos de miles de personas que seguían el viacrucis por televisión, emitido íntegramente por los canales de TVE2, Telemadrid y 13TV.

Otros medios de comunicación (como, por ejemplo, El Mundo) destacaron la presencia de la saeta en el viacrucis de la JMJ. El periódico La Razón, la definió como "uno de los momentos más emocionantes".